viernes, 24 de junio de 2011

El romanticismo tiene muchas formas: "Si alguna vez me albergaste en tu corazón", dijo Hamlet. (P.Z)

Los dedos pueden ser anzuelos para virtudes sólidas, usando de una cita oculta. Pero también el camino que nos lleva al centro del deseo. Y que señalan la página del libro que tú no leerás, cuando los albatros comen en la nuca de los marineros muertos y atados al timón: rumbo a dónde?

C2

4 comentarios:

Rocío dijo...

"...permanece ausente de esa bienaventuranza y alienta por cierto tiempo en la fatigosa vida de este mundo de dolor para contar mi historia"

Quién sabe rumbo a dónde...

Abrazo de viernes (o sábado, según corresponda) ;)

Pedro L. Rodriguez dijo...

Saludos desde Venecia, las góndolas se han secado y los canales se han cubierto de piroclastos, aún así, hay almas que navegan por alli.

Sea_Lord

CONSUL2 dijo...

Sweet: "¿quieres tragar vinagre o comerte un cocodrilo?", se preguntaba el príncipe. Los rumbos son siempre sobre las olas.

Saludos

C2

CONSUL2 dijo...

Vancouver: Almirante, vigile usted los volcanes, que, aunque dormidos, pueden cubrir Venecia de las cenizas ardientes de los recuerdos.

C2