¿Pertenecemos al grupo de aquellas personas que perseveran en la repetición del deseo, o por el contrario estamos entre quienes ven en el cúmulo de pieles y actos, que ascienden hasta el Angel Novus de Benjamin, el signo de su fútil pesadilla, de su inexistencia sin sentido final? Que las princesas y el olvido fueran una dedicatoria no establece precisamente fronteras entre el deseo y su reflejo.
C2
1 comentario:
Amo amado, le he dejado un reto en mi blog, se que su pasion son los libros, que los ama tanto o mas que yo los amo, y tengo curiosidad de saber en que universos esta sumergido en estos dias...
besos, miles de besitos de su gata
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